Todas las publicaciones (109)

Ordenar por

Las civilizaciones originarias fueron las primeras sociedades humanas en desarrollar sistemas organizados de gobierno, economía,13516331290?profile=RESIZE_400x cultura y tecnología. Estas civilizaciones sentaron las bases para el desarrollo de la humanidad y dejaron un legado que aún influye en nuestros días.

¿Qué son las civilizaciones originarias?
Las civilizaciones:
1. Mesopotamia: La cuna de la civilización.
2. Egipto: La civilización del Nilo.
3. Civilización del Indo: Avances en urbanismo.
4. China: La dinastía más antigua.
5. Mesoamérica: Cultura y astronomía avanzada.
6. Los Andes: Los maestros de la ingeniería.

Estas civilizaciones dejaron una huella imborrable en la humanidad. Desde la escritura y las matemáticas hasta la arquitectura y la filosofía, sus aportes siguen vigentes en nuestra vida cotidiana.

El estudio de estas culturas nos ayuda a comprender nuestro pasado y valorar la diversidad de pensamientos e innovaciones que han modelado el mundo actual.

Leer más…

La amistad: mi refugio en el caos

Si hay algo que realmente me ha salvado en la vida, es la amistad. No sé qué haría sin mis amigas, sin esas personas que me13456639068?profile=RESIZE_400x entienden incluso cuando no digo nada.

La amistad es un tipo de amor diferente, uno que no necesita promesas ni títulos para ser real. Es saber que puedes contar con alguien sin importar la hora, que puedes ser tú misma sin miedo a ser juzgada. Es enviar memes sin contexto, quedarse hasta tarde hablando de todo y de nada, y reírse de cosas que solo ustedes entienden.

Pero también es complicada. No todas las amistades duran para siempre. He perdido amigas que pensé que estarían en mi vida siempre, y duele. Duele cuando alguien deja de buscarte, cuando te das cuenta de que la conexión que tenían ya no es la misma. Pero supongo que así es la vida: algunas personas están de paso, y otras se quedan.

Hoy valoro más que nunca a las personas que siguen aquí. A mis amigas que me han visto en mis peores momentos y no se han ido. Porque al final, no importa cuántas personas pasen por tu vida, lo que realmente cuenta es quiénes se quedan cuando más los necesitas.

Leer más…

La tristeza: mi sombra silenciosa

No sé si estoy triste o simplemente cansada de todo. A veces me despierto y siento un peso en el pecho, como si algo estuviera mal pero no supiera exactamente13456625698?profile=RESIZE_400x qué es. Y odio sentirme así, porque no hay una razón específica, pero tampoco puedo ignorarlo.

La tristeza es rara. No siempre viene con lágrimas ni con gritos, a veces es solo un silencio incómodo dentro de ti. Es estar rodeada de gente pero sentirte sola. Es sonreír y fingir que todo está bien cuando por dentro sientes que te estás desmoronando.

Me gustaría poder hablar más de esto sin que la gente piense que exagero. Porque cada vez que intento explicar cómo me siento, alguien dice: “Todo estará bien” o “Solo anímate”. Y no es tan fácil. Si pudiera elegir, obviamente no querría sentirme así.

Pero he aprendido que está bien estar triste. No todo tiene que estar bien todo el tiempo. A veces solo necesitas un día para ti, para llorar, para escribir, para escuchar música que te rompa un poquito más. Y eso no significa que estés mal, solo significa que eres humana.

Leer más…

Diario de una adolescente El amor: eso que todos queremos y tememos

El amor es complicado. No porque sea difícil de sentir, sino porque nos enseñan que tiene que ser perfecto, como en las películas. Desde que soy niña, he13456635269?profile=RESIZE_400x escuchado que el amor es encontrar a “tu otra mitad”, que cuando amas a alguien todo es bonito y mágico. Pero nadie habla de la parte en la que el amor también duele.

He estado enamorada, o al menos eso creo. Es una sensación extraña, como si de repente alguien se convirtiera en tu pensamiento favorito, en la razón por la que sonríes sin darte cuenta. Pero también es aterrador. Porque cuando amas, entregas una parte de ti, y siempre existe la posibilidad de que esa persona no la cuide como esperas.

Me gustaría decir que el amor es solo felicidad, pero no lo es. A veces es esperar un mensaje que nunca llega, sentir que no eres suficiente, o ver a la persona que quieres con alguien más. Pero también es reírse juntos de cosas tontas, sentir mariposas en el estómago y compartir silencios que no incomodan.

Aún no sé qué es exactamente el amor. Solo sé que no quiero que sea como en los cuentos de hadas, donde todo es perfecto y predecible. Quiero un amor real, con errores, con momentos incómodos, con risas genuinas y sentimientos sinceros. Y aunque sé que a veces dolerá, también sé que valdrá la pena sentirlo.

Leer más…

Diario de una adolescente Nostalgia: el peso de los recuerdos

 La nostalgia es un sentimiento extraño.No es tristeza, pero tampoco felicidad. Es como un recordatorio de que el tiempo sigue13453141256?profile=RESIZE_400x avanzando, de que las cosas cambian, y de que lo que un dia fue ya no volvera ser igual.
Lastimosamente pasa mucho. Escucho una canción y de repente estoy de vuelta en un momento que ya no existe. Veo fotos antiguas y siento un nudo en la garganta porque extraño a la persona que era antes. A veces me gustaria retroceder en el tiempo, volver a esos dias en los que las cosas parecian mas simples, cuando no tenia tantas preocupaciones ni miedos.
Extraño a personas que ya no están en mi vida. Extraño lugares, momentos, versiones de mi misma que ya no existen. Y aunque sabia que el cambio es parte de la vida, no puedo evitar desear que algunas cosas se hubieran quedado igual.
Pero tambien entiendo que la nostalgia significa que viva momentos valieron la pena. Que si extraño es porque en su momento fui feliz. Y tal vez, algún día  mire hacia atras y me de cuenta de que los momentos que hoy vivo tambien se volveran recuerdos que atesoraré.

Leer más…

Cada año, el 14 de febrero se convierte en un día especial para millones de personas alrededor del mundo. No solo es un día para13453143054?profile=RESIZE_400x celebrar el amor romántico, sino también para honrar la amistad y los lazos que nos unen a aquellos que nos rodean. El Día del Amor y la Amistad es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de las relaciones en nuestras vidas. El amor y la amistad son fundamentales para nuestra felicidad y bienestar, y este día nos recuerda la importancia de cultivar y celebrar estos sentimientos. El amor es un sentimiento universal que nos conecta a todos. Puede tomar muchas formas, desde el amor romántico hasta el amor familiar y el amor propio. El Día del Amor y la Amistad es un momento para expresar nuestro cariño y aprecio hacia aquellos que nos rodean, y para recibir el mismo cariño y aprecio de ellos. La amistad es otro aspecto fundamental de nuestras vidas. Los amigos son aquellos que nos apoyan, nos escuchan y nos hacen reír. Son los que nos ayudan a superar los momentos difíciles y nos celebran en los momentos felices. El Día del Amor y la Amistad es un momento para agradecer a nuestros amigos por todo lo que hacen por nosotros. En este día especial, podemos celebrar de muchas maneras. Podemos sorprender a nuestros seres queridos con regalos y gestos de cariño, podemos pasar tiempo de calidad con nuestros amigos y familiares, o simplemente podemos tomar un momento para reflexionar sobre la importancia del amor y la amistad en nuestras vidas. En resumen, el Día del Amor y la Amistad es una celebración de la unión y el cariño que nos une a todos. Es un momento para expresar nuestro amor y aprecio hacia aquellos que nos rodean, y para recibir el mismo cariño y aprecio de ellos. Así que no olvides celebrar este día especial con aquellos que te importan.

Leer más…

La realidad de nuestros alumnos y la empatía

Ser maestro en una secundaria ubicada en un sector marginado es un reto que va más allá de la enseñanza de contenidos académicos. A menudo, en nuestras conversaciones diarias con compañeros docentes, nos encontramos repitiendo frases como: "Los alumnos no quieren aprender", "no tienen valores", "son groseros", "solo vienen a jugar y a pasar el tiempo". Confieso que en algunos momentos también he caído en esta manera de pensar. Es fácil frustrarse cuando las estrategias didácticas no parecen dar frutos, cuando la disciplina se convierte en un problema constante o cuando la indiferencia de los estudiantes parece ser la norma.

Sin embargo, con el tiempo y con una mirada más atenta, me he dado cuenta de que hay algo mucho más profundo detrás de esa aparente falta de interés. Nuestros alumnos no solo asisten a la escuela con mochilas cargadas de libros, sino también con un peso invisible: las dificultades que enfrentan en su entorno familiar y social.

Muchos de ellos viven en hogares donde la desintegración familiar es el pan de cada día, donde la violencia intrafamiliar es la norma, donde las adicciones y el abandono los han marcado desde la infancia. Para algunos, la escuela es el único espacio donde pueden encontrar un respiro, aunque a veces lo expresen de maneras que no entendemos a simple vista.

Ante esta realidad, he aprendido que nuestra labor docente no puede limitarse únicamente a la enseñanza de conocimientos. Debemos acercarnos a nuestros alumnos con empatía, intentar comprender su contexto y reconocer la carga emocional con la que llegan a nuestras aulas. No se trata de justificar la indisciplina o de minimizar la importancia del aprendizaje, sino de entender que, en muchos casos, el verdadero problema no es la falta de interés en la escuela, sino el caos emocional y familiar en el que están inmersos.

No somos psicólogos ni tenemos la solución para todos sus problemas, pero sí podemos hacer una gran diferencia con algo aparentemente sencillo: escucharlos. Hacerles sentir que no están solos, que hay alguien que los ve, que los comprende y que está dispuesto a caminar con ellos, aunque sea un tramo corto en su vida. A veces, una palabra de aliento, un gesto de comprensión o simplemente nuestro acompañamiento y escucha pueden marcar una diferencia de día bueno y de uno malo, y porque no, podría ser una motivación para un cambio en la dirección de su historia.

Leer más…

El Jumbo Jet más grande del mundo Airbus A390

Impresionante Airbus A390 de 3 pisos, el Jumbo Jet más grande del mundo con capacidad para 1000 pasajeros.
El gigante aeronáutico francés AIRBUS ha presentado su último proyecto, el A390. Será el Jumbo jet de pasajeros más grande del mundo y el primer avión de tres pisos de la historia.
El Airbus 390 vendrá en dos variantes, una es el A390-800 y la otra -900.
El A390-800 será un avión de 3 pisos y el A390-900 será un avión de 2 pisos, pero estas variantes aún no están finalizadas y pueden cambiar a medida que evolucione el proyecto.
Tendrá 6 motores a reacción Rolls Royce.
Puede volar 7.500 millas sin parar.
El avión es tan grande que necesitará una pista de 1,2 millas (1,9 km) para despegar y aterrizar.
Hasta el momento, la fecha de lanzamiento aún no está confirmada. Lufthansa (compañía aérea alemana) será el cliente de lanzamiento y ha pedido 1 avión.
Emirates será el mayor usuario del Airbus A390 y ha pedido 190 aviones.

13443332300?profile=RESIZE_584x

Leer más…

El títular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Mario Delgado Carrillo, aseguró que con base a la experiencia de las13443324659?profile=RESIZE_400x maestras y maestros de país, se retroalimenten y modifiquen los nuevos libros de texto para educación básica.
Al participar en la Reunión Plenaria de las y los legisladores del Partido del Trabajo (PT), el funcionario afirmó que se busca que el Sistema Educativo Nacional (SEN) forme ciudadanos críticos, reflexivos, participativos, muy conscientes y solidarios de su comunidad.

“Lo que queremos justamente, atendiendo a esta autonomía profesional, es que los propios maestros, a partir de la experiencia en el aula, retroalimenten los libros de texto y que vayamos perfeccionándolos, modificándolos, incorporando cosas, sacando lo que no funcionó, para que sean un instrumento muy vivo y que sea un apoyo contundente en el aula”, expresó Delgado Carrillo.

Respecto a los Consejos Técnicos Escolares (CTE), el Secretario afirmó que en esta administración dejen de ser burocráticos, y se transformarán en comunidades de aprendizaje.
“Lo que estamos haciendo nosotros es darle la vuelta a eso y que se conviertan en comunidades de aprendizaje. Que sea un espacio para que las y los maestros intercambien experiencias de cómo les está yendo, cómo están enseñando determinadas materias o cómo están llevando determinados proyectos, y entre ellos puedan compartir sus experiencias y con ello mejorar lo que están haciendo en las aulas”.
Afirmó que se busca que los maestros tengan esta dinámica permanente de intercambio de experiencias para que mejoren el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Expuso también que La Nueva Escuela Mexicana (NEM), modelo pedagógico impulsado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador dio un giro por completo al modelo tradicional del maestro frente al grupo, del maestro que dictaba sin mayor interacción, a los esquemas de memorizar, de dar información, sin que se provocara la reflexión, la participación de las niñas y los niños.
“La Nueva Escuela Mexicana se basa, por ejemplo, en la autonomía profesional docente. Confiamos en las y los maestros, en la experiencia que tienen, en los saberes acumulados que tienen, para que ellos puedan tener más libertad a la hora de trabajar en el aula, se trabaja además por proyectos, esto es que es más intensa y más eficaz la experiencia del aprendizaje”, puntualizó Delgado Carrillo.

https://profelandia.com/libros-de-texto-a-revision-esto-dijo-el-titular-de-la-sep/

Leer más…

Quiere SEP uso de la IA para capacitar a maestros

El secretario de Educación Pública, Mario Delgado Carrillo, destacó la importancia de enfocar el uso de la Inteligencia Artificial13443311482?profile=RESIZE_400x (IA) en la capacitación docente, con especial énfasis en las comunidades con menos recursos.

Comparó esta iniciativa con el uso innovador de la radio en 1921 por José Vasconcelos, resaltando que hoy se debe aprovechar la tecnología de última generación con el objetivo de fortalecer la educación.

“Tenemos la novedad de la Inteligencia Artificial y mucha gente se preguntará si la utilizamos o no para la educación, si nos quedamos pasivos y sufrimos las consecuencias de un avance tecnológico, que es inevitable, o pensamos estratégicamente cómo aprovechamos las ventajas de esos avances tecnológicos para mejorar la educación”, subrayó.

En el marco de la conferencia “La IA y la transformación educativa en México”, organizada por la UNESCO como parte de la conmemoración del Día Internacional de la Educación 2025, el secretario enfatizó que, además de las habilidades técnicas como el dominio de la IA, la ciberseguridad y la alfabetización tecnológica, serán esenciales las habilidades humanas como el pensamiento creativo, la resiliencia, la adaptabilidad, el liderazgo, el trabajo en equipo, la comunicación y la colaboración. Además, resaltó valores como la empatía, la compasión y la fraternidad.

En este contexto, Mario Delgado aseguró que el enfoque humanista, crítico y comunitario de la Nueva Escuela Mexicana (NEM), fundamentado en los principios de igualdad, inclusión, democracia y construcción colectiva, será clave para abordar las implicaciones éticas de la IA. También destacó que la velocidad con la que se genera conocimiento en la actualidad representa un gran desafío para los sistemas educativos.

El secretario explicó que la IA ofrece oportunidades únicas, como la optimización del tiempo de los docentes al facilitar el diseño de estrategias pedagógicas más efectivas, permitiéndoles enfocarse en aspectos humanos y socioemocionales.

En tanto afirmó que esta tecnología puede proporcionar a los estudiantes acceso a plataformas de aprendizaje personalizado, autoformación y tutorías virtuales, con materiales educativos adaptados a sus necesidades individuales.

El uso de la IA también puede ser clave para cerrar brechas educativas, particularmente en comunidades marginadas y para estudiantes con discapacidad. Según Delgado, la creación de herramientas personalizadas puede ayudar a reducir la deserción escolar y abordar problemas de aprendizaje de manera temprana, sin requerir una infraestructura compleja.

Sobre los retos éticos, mencionó la necesidad de asegurar que la IA sea utilizada con perspectiva y responsabilidad social, promoviendo su implementación de manera que respete la dignidad y privacidad de las personas y comunidades.

En cuanto a los avances en el Sistema Educativo Nacional, el secretario mencionó los esfuerzos por transformar la Educación Media Superior mediante alianzas con empresas de tecnología de vanguardia para desarrollar nuevas currículas. Destacó al Conalep, que actualmente ofrece seis carreras relacionadas con ciencia de datos, IA, expresión gráfica digital, pilotaje de drones, soporte y mantenimiento de equipo de cómputo, y telecomunicaciones, además de trabajar en programas de ciberseguridad, semiconductores, electromovilidad y tecnologías de vehículos eléctricos.

Delgado también subrayó que México ocupa el segundo lugar dentro de la OCDE en número de graduados en ingeniería, con un 25% de egresados en disciplinas STEM (Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas).

Asimismo, mencionó que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha conectado cerca de 68 mil escuelas y se espera que para 2025 todas las instituciones de Educación Media Superior estén conectadas.

“He invitado a la ANUIES a que conformemos un observatorio de la IA en la educación; ahí vamos a invitar a la UNESCO, porque no podemos ser sorprendidos. Es mejor estar atentos a lo que está pasando en el mundo, a cuáles son las mejores prácticas de la inteligencia artificial en la educación y que no suframos las consecuencias del mal uso de la inteligencia artificial”, agregó.

Finalmente, informó que el Día Internacional de la Educación 2025 se celebra en las escuelas públicas del país a través de los Maratones para la Lectura, una iniciativa impulsada por la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, con el objetivo de fomentar una cultura de lectores en México.

https://profelandia.com/quiere-sep-uso-de-la-ia-para-capacitar-a-maestros/

Leer más…

Implosión de una lata de bebida refrescante

Procedimiento
Implosión de una lata de refresco. Se coloca en el fuego un bote vacío que se calienta hasta que hierve. Al hervir, los vapores de agua expulsan al aire que existe en el bote; en el interior solo queda agua líquida y vapor de agua a 100 ºC y 760 mmHg. Entonces con las pinzas cogemos el bote y lo volcamos invertido en el recipiente con agua líquida con hielo. La presión interior se reduce a 25 mmHg: el agua líquida del recipiente frío entra en el bote y la presión exterior de 760 mmHg lo hace implosionar.

Explicación
Implosión de una lata de refresco
Línea de saturación
El fundamento de este proceso es la dependencia de la presión de vapor del agua con la temperatura. Esta es la presión que existe en un recipiente cerrado donde coexisten las fases líquida y vapor. En este sistema la presión depende exclusivamente de la temperatura p=f(T). Si aumentamos la temperatura parte del agua se vaporiza y la presión crece. Y si enfriamos, parte del vapor de agua se condensa y la presión se reduce. En nuestra experiencia pasaremos del estado 1 [100 ºC, 760 mmHg] al estado 2 de 25 mmHg].

Leer más…

Decálogo para Cuidar el Bienestar Emocional del Docente

1. Reconoce tus emociones y escúchate a ti mismo.13416057076?profile=RESIZE_400x
Es fundamental que los docentes se permitan sentir y aceptar sus emociones, sean positivas o negativas. Identificar qué te genera estrés, frustración, alegría o satisfacción te ayuda a gestionar mejor tus estados de ánimo. Puedes llevar un diario emocional para reflexionar sobre tu día y tus emociones, identificando patrones que te ayuden a tomar decisiones más conscientes.

2. Establece límites claros entre el trabajo y la vida personal.
El rol docente es demandante, pero es esencial marcar límites para evitar el agotamiento. Define horarios para trabajar y respétalos. Una vez fuera del horario laboral, desconéctate del correo y las actividades escolares. Dedica tiempo a tus hobbies, familia y amigos para mantener el equilibrio.

3. Fomenta una red de apoyo sólida.
Rodéate de colegas, amigos y familiares con quienes puedas compartir tus preocupaciones y logros. Conversar con otros docentes puede brindarte nuevas perspectivas y estrategias para afrontar desafíos comunes. Busca también espacios donde puedas expresarte libremente y recibir apoyo emocional.

4. Practica actividades de autocuidado regularmente.
Incorpora hábitos que promuevan tu bienestar físico y mental. Dormir bien, mantener una alimentación equilibrada, hacer ejercicio, y practicar técnicas de relajación como el yoga o la meditación son claves para mantenerte en equilibrio. Incluso pequeños momentos de autocuidado, como disfrutar una taza de té o dar un paseo, hacen una gran diferencia.

5. Aprende a delegar y priorizar.
No intentes hacerlo todo. Aprende a priorizar tus tareas y delegar cuando sea posible. Elige cuáles son las actividades más importantes y enfócate en ellas. Esto te ayudará a evitar el estrés por sobrecarga laboral y te permitirá trabajar de manera más eficiente.

6. Desarrolla habilidades de gestión del estrés.
El estrés es una constante en la vida docente, pero puedes aprender a gestionarlo. Prueba técnicas de respiración consciente, organiza tu tiempo con listas o herramientas de planificación y dedica momentos específicos para relajarte. Recuerda que el manejo del estrés no solo mejora tu bienestar, sino también tu desempeño en el aula.

7. Busca formación en inteligencia emocional.
La inteligencia emocional te ayuda a gestionar tus propias emociones y a entender mejor las de tus estudiantes. Participar en talleres o leer sobre este tema te permitirá crear un ambiente más positivo en el aula y mejorar tus relaciones interpersonales.

8. Celebra tus logros, por pequeños que sean.
Es fácil concentrarse en lo que falta por hacer o en los retos, pero dedicar tiempo a reconocer tus avances y éxitos es crucial para mantenerte motivado. Cada alumno que aprenda algo nuevo gracias a ti o cada problema resuelto es una victoria que merece ser celebrada.

9. Permítete descansar y tomar pausas.
El descanso no es un lujo, es una necesidad. Tómate pequeños descansos durante el día para recargar energías. También es importante que te tomes vacaciones y desconectes completamente del trabajo para regenerarte física y emocionalmente.

10. Acude a un profesional cuando sea necesario.
No tengas miedo de buscar ayuda profesional si sientes que el estrés, la ansiedad o cualquier emoción negativa están afectando tu vida diaria. Hablar con un psicólogo o terapeuta puede ayudarte a encontrar herramientas y estrategias personalizadas para superar los momentos difíciles.

Este decálogo está diseñado para recordarte que cuidar de tu bienestar emocional no es egoísta, sino una necesidad esencial para desempeñar tu labor como docente de manera plena y sostenible. Al cuidarte a ti mismo, también estás cuidando a tus estudiantes, ya que un docente en equilibrio es capaz de transmitir más positividad y energía en el aula.

Leer más…

Cómo cuidar el benestar emocional del docente

El bienestar emocional del docente es fundamental no solo para su calidad de vida, sino también para el impacto positivo13416090695?profile=RESIZE_400x que puede tener en sus estudiantes. Reconocer y expresar nuestras emociones de manera saludable requiere un enfoque consciente y constante. Aquí algunos consejos clave:

1. Reconoce tus emociones
Haz una pausa diaria para reflexionar cómo te sientes.
Usa herramientas como un diario emocional para registrar tus emociones y posibles desencadenantes.
2. Acepta tus emociones
No juzgues tus sentimientos como buenos o malos; simplemente son una respuesta natural a tus experiencias.
Permítete sentir tristeza, alegría, enojo o cualquier emoción sin reprimirla.
3. Comunica tus emociones de forma asertiva
Habla de cómo te sientes con colegas, familiares o amigos de confianza.
Usa frases como: "Me siento frustrado cuando...” o "Estoy feliz porque...” para expresarte sin culpar a los demás.
4. Crea hábitos que fortalezcan tu bienestar
Dedica tiempo a actividades que disfrutes fuera del trabajo.
Practica técnicas de relajación como la meditación o ejercicios de respiración.
5. Busca apoyo si lo necesitas
Si te sientes abrumado, no dudes en buscar ayuda profesional con un psicólogo o terapeuta.
Participa en grupos de apoyo para docentes donde puedas compartir experiencias y consejos.
6. Fomenta una cultura emocional positiva en tu entorno laboral
Promueve espacios para que los docentes hablen abiertamente de sus emociones.
Propón talleres sobre inteligencia emocional en tu escuela.

Leer más…

Diario de una adolescente: Aprendiendo a controlar mi enojo

Hoy he estado pensando mucho en13219939455?profile=RESIZE_400x cómo manejo el enojo, porque honestamente, siento que se me escapa de las manos más veces de las que me gustaría admitir. No sé si es porque tengo demasiadas cosas acumuladas en mi cabeza o porque simplemente no sé cómo expresar lo que siento, pero cuando algo me molesta, es como si se encendiera un interruptor y de pronto no pudiera detenerme.

Es frustrante. No quiero explotar, no quiero decir cosas de las que luego me arrepiento, pero a veces siento que no tengo otra opción. Todo se acumula dentro de mí: las críticas de mis papás, el estrés de la escuela, las discusiones con mis amigas, y hasta cosas pequeñas, como que alguien me interrumpa o no escuche lo que digo. Todo eso me va llenando como un globo hasta que, eventualmente, reviento.

Lo peor de todo es que, después de un arranque de enojo, siempre me siento mal. Me siento culpable por haber gritado, por haber actuado de una manera que no me gusta. Es como si mi enojo fuera más fuerte que yo, como si no pudiera controlarlo, y eso me hace sentir débil. Porque sé que no es justo desquitarme con los demás, especialmente con las personas que me importan. Pero, en el momento, es difícil detenerme.

A veces trato de justificarme diciendo que tengo razones para estar enojada. Y es cierto, todos tenemos cosas que nos molestan. Pero me doy cuenta de que no es tanto lo que pasa, sino cómo reacciono a ello. Porque, aunque tenga razón para estar molesta, mi reacción exagerada solo empeora las cosas. Si discuto con mis papás, termino diciendo algo hiriente y luego el problema es más grande. Si me enojo con una amiga, puedo alejarla, incluso si lo que me molestó no era tan grave.

Últimamente he estado buscando formas de controlar mi enojo, porque sé que no quiero seguir así. Lo primero que estoy intentando es detenerme antes de explotar. Me he dado cuenta de que siempre hay un momento, justo antes de que diga o haga algo de lo que me arrepentiré, en el que puedo tomar una decisión. Es difícil, pero estoy tratando de respirar profundo y darme unos segundos para pensar. A veces funciona, otras no tanto, pero estoy tratando.

Otra cosa que estoy intentando es escribir lo que siento. Este diario me ha ayudado mucho, porque me permite sacar todo lo que llevo dentro sin necesidad de gritar o discutir con alguien. Cuando escribo, puedo organizar mis pensamientos y entender mejor por qué estoy enojada. A veces, me doy cuenta de que lo que me molesta no es tan importante como parecía en el momento, o que hay una forma más tranquila de resolverlo.

También he empezado a darme cuenta de que muchas veces mi enojo viene de cosas que no digo en el momento. Por ejemplo, si algo me molesta, pero no lo hablo porque tengo miedo de cómo reaccionará la otra persona, eso se queda dentro de mí y, eventualmente, explota. Estoy tratando de ser más honesta y de expresar mis sentimientos antes de que se acumulen. No siempre es fácil, porque me da miedo que la gente se moleste o me rechace, pero estoy aprendiendo que es mejor hablar las cosas a tiempo que guardarlas y luego estallar.

Sé que no voy a cambiar de un día para otro. Todavía tengo mucho que aprender sobre cómo manejar mi enojo y cómo ser más paciente conmigo misma y con los demás. Pero creo que el simple hecho de darme cuenta de que quiero mejorar ya es un buen comienzo. No quiero ser una persona que se deja llevar por el enojo, que hiere a los demás o que siempre está a la defensiva. Quiero aprender a manejar mis emociones de una manera más saludable, porque sé que eso me hará sentir mejor conmigo misma y con las personas que me rodean.

Escribir esto me hace sentir un poco más ligera. Es como si, al poner en palabras lo que siento, pudiera entenderme mejor. Todavía me falta mucho camino por recorrer,

Leer más…

Diario de una adolescente: Mis amistades y su constante inestabilidad

Hoy estuve pensando en mis13219994264?profile=RESIZE_400x amistades y en lo complicado que a veces es mantenerlas. Parece que siempre estoy en una montaña rusa emocional cuando se trata de las personas que me rodean. Un día todo está bien, nos reímos, hacemos planes, y al siguiente, algo pasa y todo se siente diferente. Es agotador tratar de entender por qué las cosas cambian tanto y tan rápido.

A veces siento que soy yo el problema. Me pregunto si estoy haciendo algo mal, si soy demasiado exigente o demasiado insegura, o si simplemente no sé cómo ser una buena amiga. Me cuesta encontrar un equilibrio. Por un lado, quiero ser abierta, confiar en las personas y sentir que puedo contar con ellas. Pero, por otro lado, tengo miedo de que me lastimen o de que, de un momento a otro, decidan que ya no quieren estar cerca de mí.

Hay días en los que me siento completamente conectada con mis amigas. Esos días me llenan de felicidad porque siento que pertenezco, que tengo un lugar en sus vidas. Pero luego, algo cambia. A veces son pequeños comentarios que me hacen dudar, como cuando una de ellas no me incluye en un plan o cuando noto que hablan entre ellas de cosas que no me cuentan. Otras veces son malentendidos que terminan en silencios incómodos y distancia. Es en esos momentos cuando me invade la inseguridad, y empiezo a pensar que tal vez no soy lo suficientemente buena amiga para ellas.

También está el hecho de que a veces me cuesta expresar lo que siento. Cuando algo me molesta o me duele, mi reacción es guardármelo, porque tengo miedo de que, si digo algo, se enojen o se alejen de mí. Pero guardar las cosas solo hace que me sienta peor, porque sigo acumulando dudas y frustraciones. Es como un círculo vicioso: no hablo, me siento distante, y esa distancia termina dañando la relación aún más.

Lo que más me confunde es que no entiendo por qué las amistades tienen que ser tan complicadas. Veo a otras personas que parecen tener grupos súper estables, que se llevan bien todo el tiempo y que nunca parecen tener problemas. ¿Por qué para mí no es así? ¿Es normal que las amistades sean tan inestables, o soy yo la que no sabe cómo mantenerlas?

Algunas veces he pensado en alejarme de todo, en quedarme sola y no tener que preocuparme por estas cosas. Pero la verdad es que no quiero estar sola. Quiero tener amistades que duren, que sean auténticas y en las que pueda confiar. No quiero seguir sintiendo que estoy caminando sobre hielo delgado con las personas que me importan.

Creo que parte del problema es que tengo expectativas muy altas sobre lo que debería ser una amistad. Espero que mis amigas siempre estén ahí para mí, que me entiendan sin necesidad de explicarles todo, que me incluyan en todo lo que hacen. Pero tal vez eso no sea justo. Tal vez ellas también están lidiando con sus propios problemas e inseguridades, y no siempre pueden ser la versión perfecta de lo que yo espero.

Hoy, mientras escribo esto, me doy cuenta de que necesito trabajar en cómo manejo mis relaciones. Tal vez debería aprender a hablar más sobre cómo me siento, a no guardar las cosas hasta que exploten. También creo que debo aceptar que las amistades no siempre son perfectas, que habrá momentos buenos y malos, y que eso no significa que no sean valiosas.

Al final del día, sé que las personas vienen y van, y que no siempre puedo controlar lo que pasa en una amistad. Pero quiero aprender a ser más paciente, tanto con las personas que me rodean como conmigo misma. Porque aunque ahora siento que mis relaciones son inestables, también sé que puedo hacer algo para cambiarlo

Leer más…

Hoy he estado pensando en13219987876?profile=RESIZE_400x algo que me hace sentir extraña, incluso un poco culpable: me doy cuenta de que, la mayoría de las veces, los problemas de los demás no me interesan. No es que quiera ser insensible o mala persona, pero cuando alguien me cuenta sus problemas, simplemente no siento nada. Me quedo escuchando, asintiendo, diciendo lo que sé que esperan escuchar, pero por dentro no tengo esa conexión emocional que parece que debería tener.

A veces pienso que soy egoísta. ¿Por qué me cuesta tanto empatizar con los demás? Por ejemplo, cuando una amiga me cuenta que está peleada con su novio, o que tuvo una discusión en casa, me parece algo tan lejano, tan irrelevante, que no puedo evitar desconectarme. Claro, digo cosas como “Qué mal” o “Eso debe ser difícil”, pero en realidad, estoy pensando en cualquier otra cosa. Y luego me pregunto: ¿está mal que me sienta así?

No sé exactamente cuándo empezó esto. Tal vez es porque, en mi mente, ya tengo suficiente con mis propios problemas. Hay tantas cosas que me preocupan en mi vida —la escuela, lo que quiero hacer en el futuro, mis inseguridades— que simplemente no tengo energía para cargar con las preocupaciones de los demás. Es como si mi cerebro se bloqueara automáticamente cuando alguien empieza a hablarme de sus dificultades, como si una parte de mí dijera: “Esto no es tu problema”.

Lo que más me inquieta es que no quiero que las personas piensen que no me importan. Porque sí me importan, solo que de una manera diferente. Por ejemplo, quiero que mis amigas estén bien, que sean felices y que superen lo que sea que las está afectando. Pero no siento esa necesidad de involucrarme profundamente, de preocuparme tanto como ellas esperan. Y cuando me doy cuenta de esto, me siento mal, porque parece que no soy la amiga que debería ser.

También me pregunto si este desinterés tiene que ver con que no siempre entiendo por qué la gente se preocupa tanto por ciertas cosas. A veces, los problemas que me cuentan parecen tan pequeños, tan insignificantes, que no entiendo por qué les afectan tanto. Tal vez eso sea lo que me hace desconectarme: pensar que las personas exageran o que hacen un drama de cosas que, desde mi perspectiva, no son tan graves. 

Pero luego pienso que no está bien juzgar lo que otros sienten. Lo que para mí puede parecer insignificante, para ellos puede ser lo más importante del mundo. Sé que cada quien vive sus emociones de manera distinta, y no quiero invalidar lo que sienten solo porque yo no lo entiendo. Aunque no lo sienta igual, quiero aprender a ser más comprensiva, a no minimizar lo que los demás están pasando solo porque no me afecta directamente.

Escribir esto me hace darme cuenta de que, en el fondo, no soy indiferente. Si fuera completamente indiferente, no estaría preocupándome por sentirme así. Tal vez mi problema no es que no me importe, sino que no sé cómo demostrarlo. Quizás, en lugar de tratar de sentir lo que los demás sienten, debería centrarme en escuchar y apoyar de la mejor manera que pueda. Porque aunque no me conecte emocionalmente con sus problemas, puedo estar ahí para ellos de otras formas.

Creo que este desinterés que siento viene, en parte, de no saber cómo manejar mis propias emociones. Estoy tan ocupada tratando de entenderme a mí misma, de resolver mis propios líos internos, que no tengo espacio para más. Tal vez, si empiezo a trabajar en mí misma, también pueda abrirme más a los demás.

No sé si alguna vez seré la persona que se preocupa profundamente por todo lo que pasa a su alrededor. Tal vez nunca lo sea, y eso está bien. Pero lo que sí quiero es aprender a ser más honesta conmigo misma y con los demás, a encontrar un equilibrio entre ser auténtica y estar presente para las personas que me importan.

Por ahora, estoy aprendiendo a no juzgarme tanto por sentir lo que siento, o por no sentir lo que creo que debería sentir. Sé que no soy perfecta, y eso incluye la manera en que me relaciono con los problemas de los demás. Pero quiero seguir creciendo, aprendiendo a escuchar sin sentirme culpable por no emocionarme tanto, y encontrando formas de ser una buena amiga, incluso cuando no siempre entienda o comparta las emociones de los demás.

Al final, creo que lo importante es ser honesta, tanto conmigo como con quienes me rodean. Tal vez no sea la persona más empática, pero estoy dispuesta a mejorar. Y aunque todavía no sé exactamente cómo hacerlo, escribir esto me hace sentir que estoy dando el primer paso.

Leer más…

Diario de una adolescente: ¿Por qué me siento tan diferente a los demás?

Hoy he estado pensando en13219981881?profile=RESIZE_400x algo que llevo sintiendo desde hace tiempo: me siento diferente a la mayoría de las personas que me rodean. No sé exactamente por qué, pero a veces parece que no encajo, como si hubiera algo en mí que no encuadra con el resto. Es una sensación extraña, porque no es que no quiera conectar con la gente, pero siempre tengo esta idea de que soy distinta, como si mi manera de pensar o de ver las cosas fuera completamente opuesta a la de los demás.

En la escuela, lo noto más que en ningún otro lugar. Mientras algunos hablan de sus cosas con tanta facilidad, yo me siento como una espectadora, alguien que observa desde fuera pero que no participa del todo. A veces, cuando estoy con mis compañeros, me pregunto cómo pueden estar tan cómodos entre ellos, como si ser parte del grupo fuera lo más natural del mundo. Yo, en cambio, siempre me siento un poco incómoda, como si tuviera que esforzarme demasiado para ser parte de algo que no termino de entender.

No es que no intente ser sociable. Hablo con mis compañeros, trato de reírme de sus chistes y seguir sus conversaciones, pero muchas veces me doy cuenta de que no comparto sus intereses. Mientras ellos hablan de fiestas, ropa o cosas que han visto en redes sociales, yo suelo pensar en cosas completamente diferentes. Me gusta reflexionar sobre la vida, imaginar historias, o simplemente perderme en mis propios pensamientos. Es como si mi mundo interior fuera mucho más interesante que lo que pasa a mi alrededor, pero eso también me hace sentir sola.

A veces me pregunto si soy la única que se siente así. ¿Será que los demás también se sienten diferentes, pero lo ocultan mejor que yo? Quizás todos llevamos dentro nuestras propias inseguridades y dudas, pero no las compartimos por miedo a ser juzgados. Me gustaría creer que no estoy sola en esto, que hay otras personas que también sienten que no encajan del todo, pero en los momentos en los que más me invade este sentimiento, es difícil no pensar que soy la única.

Lo que más me cuesta es entender por qué ser diferente me hace sentir mal algunas veces. En teoría, ser diferente debería ser algo bueno, algo que nos hace únicos, pero en la práctica, parece ser lo que más nos separa de los demás. Cuando noto que mis intereses o mis opiniones no coinciden con los del grupo, me pregunto si hay algo malo en mí, si debería cambiar para ser más parecida a ellos. Pero al mismo tiempo, sé que no quiero fingir ser alguien que no soy. No quiero perder lo que me hace ser yo.

También he aprendido que, aunque me siento diferente, eso no significa que no pueda conectar con las personas en otros niveles. Hay momentos en los que descubro que incluso alguien con quien aparentemente no tengo nada en común puede sorprenderme. Tal vez no compartimos los mismos intereses, pero eso no significa que no podamos encontrar algo que nos una. Creo que ahí está el desafío: aprender a aceptar las diferencias sin dejar que nos separen.

Sin embargo, sigo pensando mucho en lo que significa ser diferente. Me doy cuenta de que, aunque a veces me siento sola, no cambiaría quién soy. Tal vez no siempre encaje en el molde que parece ser “normal”, pero eso no significa que mi manera de ser no tenga valor. Creo que el mundo necesita a personas que piensen diferente, que vean las cosas desde otra perspectiva, porque eso es lo que lo hace interesante y diverso.

Hoy, mientras escribo esto, me doy cuenta de que ser diferente no es algo que deba esconder. Es parte de quién soy, y aunque a veces me haga sentir aislada, también me da la oportunidad de ver el mundo de una manera única. Quizás el problema no es tanto que yo sea diferente, sino que me he enfocado demasiado en las cosas que nos separan en lugar de en las que nos pueden unir.

No sé si algún día dejaré de sentirme así, pero estoy empezando a entender que no necesito encajar perfectamente con los demás para tener valor. Mi manera de ser, de pensar y de sentir es válida, incluso si no se parece a la de los demás. Y quizás, al aceptarme a mí misma, también pueda encontrar a personas que valoren esas diferencias en lugar de verlas como un obstáculo.

Por ahora, seguiré explorando lo que significa ser yo misma en un mundo que parece querer que todos seamos iguales. Tal vez no sea fácil, pero creo que al final valdrá la pena. Porque, aunque me sienta diferente, también sé que hay fuerza en eso. Y espero que algún día, las personas que me rodean también puedan verlo.

Leer más…

Contenido principal

Luis Alberto Leal Espinoza posted a photo
ayer
Tina published an article
Martes
Erick Sánchez posted a blog post
2 de Jun.
Erick Sánchez posted a blog post
2 de Jun.
Erick Sánchez posted a blog post
2 de Jun.
Erick Sánchez posted a blog post
2 de Jun.
Andar Educativo published an article
2 de Jun.
Andar Educativo published an article
2 de Jun.
Andar Educativo published an article
2 de Jun.
Andar Educativo published an article
2 de Jun.
Andar Educativo published an article
2 de Jun.
Andar Educativo published an article
31 de May.
Andar Educativo published an article
31 de May.
Andar Educativo published an article
31 de May.
Andar Educativo published an article
31 de May.
Andar Educativo posted a photo
31 de May.
Más...