En el marco de la transformación educativa que promueve la Nueva Escuela Mexicana , la asignatura de Artes se consolida como un espacio clave para el desarrollo integral de los estudiantes de secundaria. Dentro de esta materia, la danza y el ballet folclórico. se han convertido en herramientas poderosas para forjar el carácter, fortalecer valores y elevar la autoestima de los alumnos.
Lejos de ser solo una actividad recreativa, la práctica dancística se ha posicionado como un vehículo educativo y emocional. que permite a las y los adolescentes expresarse, conocer su cultura y convivir en armonía con sus compañeros.
Bailar para crecer: beneficios emocionales y sociales
El aprendizaje y la presentación del ballet folclórico en secundaria permite que los alumnos:
Mejoren su autoestima, al sentirse capaces de aprender una coreografía, presentarse ante el público y recibir reconocimiento.
Fortalezcan sus habilidades socioemocionales , al desarrollar la empatía, la paciencia y la perseverancia durante los ensayos y presentaciones.
Refuercen los valores de colaboración y trabajo en equipo, al saber que el éxito de cada número depende del compromiso de todos los integrantes.
Además, la danza fomenta un ambiente donde florecen la amistad y el compañerismo, pues durante el proceso artístico se crean lazos significativos que van más allá del aula.
Identidad y cultura: pilares del arte en la escuela
La práctica del ballet folclórico también permite a los alumnos conocer y valorar la riqueza cultural de México. Al interpretar sones, huapangos o jarabes, los jóvenes se conectan con sus raíces, despiertan el orgullo por sus tradiciones y se convierten en embajadores de su cultura dentro y fuera de la escuela.
Este proceso fortalece su identidad personal y colectiva, promoviendo un profundo respeto por la diversidad y por los elementos que nos unen como nación.
La danza como formación integral.
En la Nueva Escuela Mexicana, la formación artística es vista como un derecho y una necesidad, no como un complemento. La asignatura de Artes, con enfoque en la danza, permite desarrollar la disciplina, la sensibilidad estética y el respeto por el esfuerzo propio y ajeno, cualidades que impactan positivamente en todas las áreas de la vida escolar y personal de los alumnos.
Más que baile, un proyecto de vida
A través de la danza y el ballet folclórico, muchos estudiantes descubren no solo una pasión, sino también una vocación. Algunos continúan su formación en casas de cultura, academias o incluso en instituciones profesionales, encontrando en el arte una vía para construir su futuro.
En suma, la danza en secundaria no es solo un espectáculo: es una forma de educar el alma, fortalecer la mente y unir corazones. La Nueva Escuela Mexicana apuesta por una educación con sentido humano, y la danza es uno de sus lenguajes más poderosos.
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