Condiciones laborales y bienestar docente: el hartazgo ante el olvido
Los maestros y maestras de México han denunciado por años el deterioro de sus condiciones laborales. En 2025, estas demandas se han intensificado. La sobrecarga de trabajo administrativo, los salarios rezagados frente a la inflación, la precarización del empleo y la falta de infraestructura adecuada siguen siendo temas constantes.
El estrés laboral, el desgaste emocional y la falta de reconocimiento social están teniendo consecuencias tangibles: incremento en los niveles de ansiedad, desmotivación profesional y fuga de talento educativo. Por eso, los docentes no solo hablan de mejores salarios, sino de bienestar integral: espacios seguros, ambientes de trabajo colaborativos, menos burocracia y más enfoque pedagógico.
Salud emocional: una deuda silenciosa del sistema educativo
La salud emocional del magisterio es una herida abierta. Durante y después de la pandemia, miles de docentes enfrentaron situaciones de aislamiento, pérdida de estudiantes y familiares, y una digitalización forzada sin preparación ni acompañamiento.
En 2025, los docentes exigen políticas claras de atención emocional: acompañamiento psicológico, capacitación en manejo del estrés, y reconocimiento institucional del desgaste profesional. No se trata solo de “motivación”, sino de políticas estructurales que promuevan el cuidado del cuerpo y la mente de quienes sostienen la educación pública del país.
Abrogación de la Ley del ISSSTE 2007: el clamor por justicia social
Uno de los principales ejes del movimiento docente en este año es la exigencia de abrogación total de la Ley del ISSSTE de 2007, considerada por amplios sectores del magisterio como un retroceso en derechos laborales. Esta ley, que introdujo un sistema de pensiones basado en cuentas individuales administradas por Afores, ha reducido las pensiones a niveles inaceptables, dejando a miles de jubilados en condiciones de pobreza.
Los docentes exigen:
1.- La desaparición del régimen de cuentas individuales.
2.- El regreso al sistema solidario de reparto, como se establece en el Décimo Transitorio de la Ley del ISSSTE anterior.
3.- La eliminación del uso de la UMA para calcular pensiones, y el retorno al salario mínimo como base de referencia.
Desaparición de la USICAMM: basta de simulación y castigo
Otra bandera del magisterio en 2025 es la exigencia de desaparecer la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (USICAMM), ha sido criticada por ser un ente burocrático que castiga en lugar de reconocer la experiencia y compromiso de los docentes.
Lejos de garantizar una verdadera mejora profesional, las evaluaciones de la USICAMM han sido señaladas por su enfoque punitivo, su desconexión con la realidad de las aulas y su uso como herramienta de control político y laboral.
Décimo Transitorio: la exigencia de volver a un sistema de seguridad social digno
El Décimo Transitorio de la Ley del ISSSTE, que amparaba el derecho a una jubilación digna con base en años de servicio y sin cuentas individuales, ha sido bandera histórica de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y otros sectores como El Movimiento de Bases Sudcaliforniano con sede en los 5 municipios del Estado de BCS.
La exigencia es clara: abrogar la reforma de 2007 y restituir el modelo anterior, que garantizaba pensiones vitalicias con base en el último salario y no en el incierto rendimiento de una cuenta individual.
Docentes en pie por la dignidad
En 2025, los docentes no solo están hablando: están movilizándose, resistiendo y construyendo alternativas. Desde plantones frente al Palacio Nacional, hasta paros regionales, foros públicos y propuestas legislativas, el magisterio está luchando por una causa que va más allá de su gremio: el derecho de todas y todos a una educación pública fuerte, humana y justa.
Porque cuando un país cuida a sus maestros, está cuidando a su futuro.
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